miércoles, 23 de julio de 2008

Aventura taxil

Ayer tuve que ir a hacer una visita a una de las cosas que más le gustan a todo el mundo, como soy chico no era el ginecólogo, tampoco era el dentista.. pero casi... a un otorrino.

Por petición popular (2 personas) cogí un taxi para desplazarme, cosa que no había hecho en años, y me dí cuenta de que las cosas han cambiado:
...Llamando al número de teléfono para que me manden un taxi a casa...
- Telefonista: Nombre
- Yo: ¿Perdón? ¿Hola?
- T: Sí, ¿me dice el nombre?
- Eee..si (...) pero no creo que lo tengan
- Vale, pues dígame dónde quiere que le recojan
- (...)
- Ahora se lo envío y le avisaremos cuando llegue. Clic.
Supongo que alguien habrá llamado desde mi dirección antes, porque no me ha pedido mi número de teléfono...
A los 10 minutos llaman y una cinta gravada me informa de que mi taxi ya ha llegado.
Bajo a la calle y un taxista me señala con el dedo, asiento con la cabeza, entro y cuando voy a coger aire para decir "hola" me corta y dice:
- Espero que no me traigas un billete de 50€
- Hola. Eeee.. no señor, hace tiempo que no veo uno de esos
- A vale, pero de 100€ tampoco no? Es que ya no me queda cambio...
- No señor, llevo suelto. ¿Me lleva a (...)?
- Claro, iremos por tal y cual. Mira, ¿quieres leer la prensa (gratuita) o prefieres algo de motos? Luego me lo dejas en el asiento delantero eh? No te lo lleves...
- ... . Vale...
Después, el taxista condució hasta decirme: Ya casi hemos llegado, faltan 2 minutos.
No recuerdo si fueron 1 o 2, pero llegamos. Le devolví el periódico. Pagué y bajé.
Es una buena manera de evitar el silencio incómodo... "Mira, yo te doy un periódico y tu te lo lees. Yo te aviso cuando lleguemos."
¿Pero no te lo lleves eh?
¿Me habrán visto con ganas de robar prensa gratuita?

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