Aquí podremos observar cómo la crisis en los precios hace que todo el mundo, incluídas las verduras, se espabilen e intenten ganarse un dinero como sea, aunque eso implique vender carne.
Pues sí, ya lo vimos con las legumbres que habían abierto un negocio de decoración, y ahora lo vemos con las verduras.
En esta ocasión, el negocio de una carnicería lo lleva una familia lechugas.
Suponemos que el negocio fue tan bien que los Cogollos pronto abrirán un restaurante.
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1 comentario:
estàs fatal!!! q fort...hijos de Lechuga sociedad anonima..
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